Roma, 2 jul (EFE).- El chileno Alexis Sánchez jugó este miércoles 90 minutos en partido liguero casi dos años después de la última vez, que se remontaba a un Manchester United-Leicester de agosto 2018, y fue protagonista con un gol y dos asistencias en el triunfo 6-0 de su Inter de Milán contra el Brescia, en la Serie A italiana.
Alexis, de 31 años, celebró de la mejor manera el acuerdo oficializado este miércoles entre Inter y Manchester United para prolongar su cesión en Milán hasta el final de la presente temporada y disputó 90 minutos de alto nivel en San Siro.
«Fichamos a Alexis por su calidad. Lamentablemente le perdimos como alternativa durante mucho tiempo. Ahora empieza a estar bien, incluso si todavía no es el Sánchez que aprecié en Inglaterra. Puedo decir que va por el buen camino», aseguró un satisfecho Conte al acabar el encuentro contra el Brescia.
«Jugó un grandísimo partido. Contar con todos mis delanteros me tranquiliza», añadió el técnico del Inter, que conoce bien a Alexis al haberle tenido como rival durante su experiencia en la Premier League, en el banquillo del Chelsea, cuando el chileno vestía la camiseta del Arsenal.
El Niño Maravilla salió de titular junto al argentino Lautaro Martínez y jugó los 90 minutos de un partido liguero por primera vez este año, tras completar dos partidos en los dieciseisavos de final de la Liga Europa contra el Ludogorets búlgaro.
La última vez que el chileno había competido en los 90 minutos de un partido liguero se remontaba al agosto de 2018, cuando vestía la camiseta del Manchester United.
Tardó cinco minutos en desequilibrar el encuentro, al ofrecer un perfecto centro al inglés Ashley Young, su excompañero en Manchester, quien marcó con una gran volea de pierna derecha para el 1-0.
Un cuarto de hora después, Alexis firmó su segundo gol liguero de la temporada al transformar con seguridad una pena máxima. El otro tanto se remontaba al 28 de septiembre, en la visita al Sampdoria en Marassi.
Conte decidió dejarle en el campo hasta el final y el chileno le devolvió la confianza en la segunda mitad con otra asistencia, esta vez un centro colgado para el cabezazo del 4-0 del centrocampista Roberto Gagliardini.
